www.spotcadiz.es/relatosdesal.html

13 dic 2011

Dejo el blog en suspenso... por ahora....

     ¡Hola a todos! Ante de nada, me gustaría pedir disculpas a aquéllos que paseen periódicamente por este humilde rincón en busca de alguna actualización. Como habréis podido comprobar, no subo ninguna entrada nueva desde el pasado mes de octubre. Ello se debe a mis múltiples ocupaciones, que me obligan a relegar este blog a la última de mis preocupaciones, ya que no tengo noticias frescas que daros.

     "Relatos de sal" sigue su andadura. Puede conseguirse en muchas librerías a nivel nacional y encargándolo en cualquier centro de El Corte Inglés. Continúan llegándome impresiones acerca del libro, la mayoría muy positivas. O sea, nada nuevo.
     Por ello, he decidido dejar aparcado el blog definitivamente. Necesito centrarme en mis nuevos proyectos, en pulir un libro de relatos que estoy terminando, así como una novela ambientada en el Londres del siglo XIX. Entre la labor de escribir, mi trabajo y los preparativos de mi boda, que se celebrará el próximo 23 de junio de 2012, no tengo tiempo para nada más.

     Ha sido un auténtico placer compartir mi primera experiencia en el mundo de la literatura con todos vosotros. Sin duda, cuando realice mi segunda incursión, espero que pronto, volveréis a tener noticias mías. Hasta entonces, desearos todo lo mejor. Os pido que, os haya gustado o no, sigáis hablando de "Relatos de sal" a todo lector que pudiérais considerar interesado. Hasta la próxima.

     ¡Un fuerte abrazo!

     Francisco Palacios



14 oct 2011

Concurso en el blog "Perdida entre páginas". Premio: ¡un ejemplar de "Relatos de sal"!


     Pues sí. Como reza el título de este post, en el blog dedicado a la literatura, "Perdida entre páginas", se está llevando a cabo un sorteo en el que, el premio, es un ejemplar de mi libro, "Relatos de sal".

     Ya en su momento, la administradora del blog hizo una reseña sobre el libro, bastante positiva debo añadir. Ahora, ha decidido sortearlo, pues, según confiesa, le gusta compartir aquellas obras de las que ha disfrutado.

     Una vez más, agradecer a la admnistradora de "Perdida entre páginas", el buen trato que le está prestando a "Relatos de sal". Así da gusto publicar, oye.

     Animaros a todos los que os paséis por aquí a intentar llevaros el premio. Si no os interesa, al menos visitad el blog que organiza el concurso. Os aseguro que, sus contenidos, merecen la pena: 
http://perdidasentrepaginas.blogspot.com/2011/10/de-sorteo-salado-y-de-fallo-rojizo.html

     Un abrazo.

7 oct 2011

Consecuencias extras de publicar un libro...

     Cuando publicas un libro, sueñas con llegar a muchísimos lectores a quienes tocar una fibra sensible de su ser. Esperas ser comentado, alabado o criticado, da igual: simplemente conocido. Con el tiempo, deseas pillar algo de pasta, que nunca viene mal. Bien, yo he pasado por todas esas fases, y he dado un paso más: la preparación de nuevas historias para las que, espero, serán mis dos próximas obras.

     De todas formas, mientras la publicación de mis nuevos libros se hace realidad, el tener una editorial que ha publicado tu primer libro, puede dar lugar a nuevas sorpresas, como que se pongan en contacto contigo para que les prestes tu colaboración. Esto es lo que me ha pasado a mí. Hace una semana, Ediciones Atlantis me propuso presentar el libro de una autora gaditana, presentación que se haría el 6 de octubre. Mi papel se limitaría a decir unas palabras, sobre la autora, sobre la editorial y sobre el libro. Confieso que me puse muy tenso con el ofrecimiento, pues no se me da nada bien hablar en público. No obstante, como no soy persona que huya de los retos, acepté encantado. Con mezcla de emoción y nerviosismo a partes iguales, el pasado día 6 de octubre colaboré en la presentación de la nueva obra de la joven escritora gaditana Marina Pedraz, titulada "Las cosas que quise contarte".

     La presentación tuvo lugar en el instituto donde había estudiado la autora. Decenas de amigos y familiares la arroparon en tan feliz acontecimiento. La directora del instituto y varios ex profesores de Marina, también le dedicaron unas palabras. Como yo conocía poco a Marina, y aprovechando que la concurrencia estaba formada en gran medida por chavales jóvenes, diserté un poco acerca de la necesidad de leer, de acercar el conocimiento a las nuevas generaciones, de lo importante que es para la cultura los nuevos autores que comienzan su andadura y la aportación que ellos hacen con sus creaciones. Felicité a Marina y a sus orgullosos padres, y le deseé mucha suerte.

     En definitiva, fue una experiencia muy grata. Agradecer a Ediciones Atlantis esta nueva oportunidad, estos nuevos horizontes que me han hecho descubrir, pues es casi tan emocionante como presentar un libro propio, el acompañar a un compañero de aventuras en sus victorias.

     Un abrazo.

20 sept 2011

Un año después...

     Tras dos semanas de intensas vacaciones, por fin retomo mi vida normal. El pasado sábado día 10 de septiembre, mientras sobrevolaba la península ibérica y una pequela porción del oceano Atlántico, en dirección a Dublín, mi libro, "Relatos de sal", cumplía un año. Trescientos sesenta y cinco días de frenéticas campañas para moverlo por librerías, bibliotecas, foros de internet, redes sociales, blogs literarios y medios de comunicación.

     Pero una editorial pequeña como Ediciones Atlantis es lo que tiene: limitada capacidad para invertir en la publicidad que se merecen cada uno de los títulos que publica. Los libreros de toda España reciben el catálogo mensual de mi editorial, donde se incluyen las novedades. Lo mismo hacen muchas editoriales de todo el país. Por ello, para que un librero se interese por tu obra debe conocerla de antemano. Si no, pondrá a la venta los libros que le suene a todo el mundo, para asegurar unas ventas mínimas que le permitan mantener su negocio a flote. Es lógico.

     A pesar de todo lo anterior, estoy muy contento con los resultados. La mayoría de los lectores me han dado una opinión positiva sobre "Relatos de sal". Además, he aprendido muchísimo con toda esta experiencia, y pienso utilizar todos mis nuevos conocimientos con los siguientes libros que espero publicar en un futuro no muy lejano.

     La paciencia es fundamental para un humilde escritor que se intenta abrir paso en esta selva que es el mundo de la literatura.

     Un abrazo.

1 sept 2011

Y, de nuevo, otra reseña más: Blog "Entre montones de libros",,,


     Las cosas del internet. Nos acerca a todos. A escritores con editoriales, a lectores con obras, a escritores con lectores... Y así fue como conocí a Silvia, del blog "Entre montones de libros". Comentaba yo en una red social una cuestión acerca de "Relatos de sal", cuando apareció ella en el hilo para decirnos que poseía un ejemplar de mi libro y que, a raíz de la conversación, le había picado la curiosidad de ponerse con él. Quiere el destino ser caprichoso y, para más inri, no sólo tenía "Relatos de sal", sino que, además, es administradora de un blog dedicado a la literatura y en el que reseña las obras que llegan a sus manos. Pues dicho y hecho. Silvia ha tenido la gentileza de reseñar "Relatos de sal". Y debo decir que ha sido muy buena. No ella, que también lo ha sido por dedicarme un poco de su tiempo. Me refiero a la reseña. Genial. Bueno, que me pierdo. A continuación os dejo el enlace al blog de Silvia, "Entre montones de libros", en el que, con un criterio y estilo muy personal, desgrana todo tipo de obras literarias. El otro día lo hizo con "La Divina Comedia", de Dante. Muchos fuimos los que alucinamos con su atrevimiento al confesar no sólo que había sido capaz de enfrentarse a semejante dinosaurio (he tomado prestado el calificativo que usó uno de los lectores del blog), sino también que había disfrutado con él. Y es una lectura de lo más difícil que podáis encontrar. En fin, he aquí el enlace:

http://entremontonesdelibros.blogspot.com/2011/08/relatos-de-sal-francisco-jose-palacios.html

     ¡Un abrazo!


17 ago 2011

Reseña en el blog "Entre montones de libros"


     Y una vez más traigo una reseña realizada en un blog dedicado a la literatura. En esta ocasión, se trata del blog llamado "Entre montones de libros". Es una reseña que me ha gustado mucho, pues la autora ha logrado un atrayente resumen de "Relatos de sal", sin desvelar ninguno de los secretos que encierran las tramas del libro.

     Como es costumbre, quisiera agradecer a la administradora del blog el interés mostrado hacia mi obra. Fíjense si es así, que me ha emplazado para que le avise cuando mi segundo libro vea la luz.
     Os dejo el enlace: http://entremontonesdelibros.blogspot.com/2011/08/relatos-de-sal-francisco-jose-palacios.html

     ¡Abrazos a todos!
      






9 ago 2011

Reseña en el blog "Libros con alma"


     Durante los últimos días le he estado dando vueltas a la forma en que debía encarar la presente entrada. No es mi deseo dar la sensación de que estoy resentido con la reseña que han realizado de "Relatos de sal" en el blog "Libros con alma". No obstante, tengo mis motivos para pensar que la reseña se ha confeccionado sin haber leído el libro al completo. Me explico.

     Cuando te hacen una reseña te expones a que alaben, critiquen o sientan indiferencia hacia tu obra. Es algo que debemos aceptar todo escritor que pidamos una opinión. Por ello, el blog "Libros con alma" tuvo a bien reseñar "Relatos de sal", detalle que agradezco infinitamente al administrador del mismo. Sin embargo, cuando lees afirmaciones tales como: "Lo que no he entendido mucho es el relato de la historia de Víctor, el primero que nos encontramos al abrir el libro", cuando la primera historia que compone "Relatos de sal" es "El destino del Dorio", te crea ciertas dudas de si la obra ha sido leída o no. O, por ejemplo, el resumen que hace de "El último liberado", que ha dado lugar a que, algunos de mis lectores, me escriban preguntándome: "¿Qué libro han leído?", pues nada tiene que ver el resumen con la historia real. Dejando a un lado que llega a afirmar que "El último liberado" tiene dos partes, cuando en realidad tiene cuatro. Todo ello me ha llevado a pensar no han tenido interés por mi obra, que le han echado un vistazo por encima. Si es así, lo justo es que lo hubiera indicado en la reseña, para no confundir al lector potencial. Más que una reseña, se trata de una opinión, pero una opinión, desde mi punto de vista, mal formada, sin tener en cuenta todas las historias que encierra "Relatos de sal".

     Además, señala que la portada puede inducir a error al posible lector, que piensa, según dice, que va a encontrar una "novelita" de ciencia ficción, cuando luego se sorprende con mucho más contenido. Simplemente recordar que existe una cosa llamada sinópsis, y que en la de "Relatos de sal" hace referencia a varias de las historias, explicando algunos detalles, lo que da pistas sobre los temas que se tratan en el libro.

     En fin, os juro que no existe resentimiento por mi parte hacia la reseña comentada ni hacia su autor, mas lo único que pido cuando hablan de mi libro es que lo hagan con conocimiento de causa, tras leer la obra completa y no solo una parte de pasada. O eso, o directamente que desechen la idea de reseñar el libro. Me parece lo más justo para los lectores y para mí mismo.

     ¡Abrazos a todos!



27 jul 2011

Reseña literaria en el blog "Merce Mis Letras"

    ¡Hola a todos!

    Sí, ya sé que tengo el blog un poco abandonado, ¡pero es que no tengo tiempo para nada! Entre mi trabajo, mis asuntos personales, escribir mi nuevo libro etc... los días se me pasan en un suspiro, y casi no soy capaz de afrontar todos los asuntos que tengo pendiente.

     Bueno, hace ya algunos días que apareció la reseña, pero mejor tarde que nunca. Os dejo un enlace que lleva directamente al blog "Merce Mis Letras", de mi buena amiga homónima. Aunque escueta, la reseña tiene varias frases que me han alegrado mucho, como "es un libro para leerlo, no para ser contado" o "este libro me ha calado hondo". Agradecer a Merce que haya dedicado su tiempo, tanto a leer "Relatos de sal" como a reseñarlo.


     ¡Abrazos a todos!

13 jun 2011

"Relatos de sal" ya puede cruzar el charco...

     ¡Hola a todos!

     Os comunico que esta mañana, el editor de Ediciones Atlantis me ha informado que han llegado a un acuerdo con una distribuidora internacional para que distribuya (valga la redundancia) los libros de la editorial. Es decir, que a partir de hoy mismo, quien desee un ejemplar de "Relatos de sal" y no viva en España, tiene mucha más facilidad para obtenerlo.

     Por ahora, y según instrucciones, hay que ponerse en contacto con un señor llamado Carlos, que se encarga del tema, en el siguiente email: novedades@alebrije.cat . Él os informará de los costes que supone el envío del libro.

     Espero que ésto anime, a quienes vivan fuera de nuestras fronteras, a disfrutar de una colección de relatos que, estoy seguro, no les defraudará.

     ¡Un abrazo!

1 jun 2011

Mi experiencia en la Feria del Libro de Cádiz 2011...


     Ya era hora de que contara qué tal me fue en la Feria del Libro de Cádiz 2011. Lo primero, pedir disculpas a quienes hayan visitado mi blog en busca de información acerca del evento por no haber colgado antes este post, pero llevo unas semanas de infarto en las que no he parado. Sacar tiempo para atender mis múltiples ocupaciones es lo que tiene.

     Pues bien, para empezar, recordar que estuve en la caseta de la Librería Manuel de Falla, ya que su dueño, Juan Manuel, a quien estaré eternamente agradecido por el interés que ha demostrado siempre por "Relatos de sal", tuvo a bien invitarme a pasar una jornada con ellos.

     Y ahora, a lo que vamos. La crisis está haciendo estragos en cualquier sector de actividad, sin excluir, evidentemente, el de la venta de libros. Según el propio Juan Manuel, el nivel de visitantes disminuyó sobremanera con respecto a ediciones anteriores. El lugar en el que se celebró, el Baluarte de los Mártires, tampoco fue un sitio muy propicio que digamos, ya que se encuentra en una de las zonas menos transitadas de la ciudad. Y qué decir de la publicidad realizada por los medios de comunicación: casi nula. Lo primero que hice esa mañana del 6 de mayo cuando llegué a mi trabajo, fue mirar el periódico en busca de la noticia del inicio de la feria: nada de nada. Ni siquiera una leve reseña del evento. Flaco favor hace al fomento de la lectura el poco interés que ha parecido despertar en los medios de comunicación.

     Bueno, a pesar de todo ello, varios visitantes fueron los que se acercaron a la mesa donde me encontraba con varios ejemplares del libro, echándoles un vistazo, leyendo la contraportada y ojeando algunas páginas. Finalmente, dos fueron los lectores que decidieron llevarse un ejemplar autografiado. Debo decir que la sensación que tuve cuando me confirmaron su interés adquiriendo el libro fue tremenda... una felicidad inabarcable; una sensación difícil de describir, de satisfacción plena por comprobar que todo el esfuerzo realizado hasta entonces no había sido en vano, pues tan solo con que una persona se llevara su ejemplar de "Relatos de sal" y ocupara parte de su tiempo en leer un libro que yo he escrito, lo considero todo un triunfo.

     Basicamente, esa fue mi experiencia.

     En fin, que seguiré al pie del cañón mientras tenga la oportunidad de continuar promocionando un libro que, según las críticas que me siguen llegando, está gustando por su variedad y originalidad.

     ¡Un fuerte abrazo!

3 may 2011

¡Nos vemos en la Feria del Libro de Cádiz!

     Estimados lectores:

     Como podéis ver por lo indicado en el encabezamiento de esta entrada, voy a estar presente con mi libro, "Relatos de sal", en la Feria del Libro de Cádiz 2011. Se desarrollará entre el 6 y el 15 de mayo. Me podréis encontrar el primer día, o sea, el 6 de mayo, entre las 19.00 y 21.00 horas, encantado de atender a quien esté interesado en adquirir mi libro firmado, o, simplemente, en mantener una charla amistosa sobre cualquier cuestión.

     Debo agradecer a la librería Manuel de Falla, sita en la plaza de Mina, en Cádiz, el interés prestado por mi libro, pues son ellos (a través de la figura de Juan Manuel), quienes me han invitado a estar presente en su caseta con objeto de atender al público interesado.

     Bueno, pues ya sabéis, si queréis llevaros un libro dedicado, saludarme o charlar un rato, podéis encontrarme en la Feria del Libro de Cádiz (Baluarte de la Candelaria), el próximo viernes día 6 de mayo de 19.00 a 21.00 horas, en la caseta de la librería Manuel de Falla.

     Espero veros a todos por allí.
 
     ¡Un abrazo!

25 abr 2011

Reseña en el blog "Lector Cómplice"...


     Sin duda, durante mi periplo, aún breve, como escritor, me he topado con otros autores noveles y no tanto, que pergeñan su obra a través de distintos medios, bien sea en forma de obra literaria, bien mediante un blog. Entre todos estos creativos, de mayor o menor calidad, destaca una amiga orunda de Venezuela, cuyo nombre es Lesbia Quintero. En su rincón literario, Lesbia interactúa de forma magistral con el lector ofreciendo obras propias o ajenas. No en vano, ha tenido a bien, y muy acertadamente, llamar a su blog "Lector Cómplice". En él comparte confidencias con el lector, deslizando los mayores secretos que esconden los libros que pasan por sus manos, desgajando con gran acierto tramas y estilos, destripando no ya sus argumentos, sino sus mensajes, traspasando lo que las palabras cuentan para introducirse en la propia psicología de los autores. En este trocito de la red, no sólo encontraréis las mejores y más altruistas intenciones, sino, además, una calidad literaria envidiable.

      Pues bien, Lesbia ha tenido la amabilidad de dedicar parte de su tiempo en desgranar "Relatos de sal". Como digo, la capacidad de analizar hasta en sus más ínfimos detalles las obras literarias, hacen de nuestro Lector Cómplice un compañero idóneo para recorrer los sinuosos e imprecisos caminos que debemos recorrer los autores noveles.

      Podéis leer la reseña en el siguiente enlace http://lectorcomplice.blogspot.com/2011/04/huellas-dispersas-en-relatos-de-sal.html

     ¡Abrazos a todos!

17 mar 2011

Y de concursos sigue la cosa...¡Tercer puesto en el concurso "Hoy me ha pasado algo muy bestia"!

     Pues sí señor. Estoy muy contento con los resultados en general que están obteniendo mis relatos en los diferentes concursos blogueros en los que estoy participando. Soy totalmente nuevo en esto. El concurso del blog de Erzengel, en el que participé con "Aquéllos que vivieron", obtuvo el segundo puesto. En el de Irene Comendador, "La carbonera", conseguí 19 puntos (en otro post dije 18, pero fue un error, he hecho el recuento : D ). Desconozco qué posición obtuve, pero creo que compitió con fiereza con el resto de relatos, incluidos los ganadores (me parece, y si no, me lo creo y me quedo tan pancho...). De todas formas, ha tenido muy buena crítica, por aquello de tratar el asunto del bien y del mal, prescindiendo de bestias imaginarias como vampiros o ángeles.

     Ahora, Daniel Estorach, del blog "Hoy me ha pasado algo muy bestia", dedicado a la promoción de su primera novela homónima, ha publicado los resultados del concurso de microrrelatos "spuperheróicos". Me congratula anunciar (para el despistadillo que no se haya percatado del título del presente post), que mi microrrelato, "Equilibrio", ha obtenido un maravilloso tercer puesto. Bueno, en realidad, al haber dos primeros premiso, mi relato sería el cuarto...¡pero queda más chulo decir el tercero, ea!. El propio Daniel reconoce en su blog que no han participado todos los que él se esperaba. Por ello, rezo porque el número de participantes haya sido superior a cuatro ; D. Os pongo el enlace: http://soyunsuperheroe.blogspot.com/2011/03/microrrelato-ganador-de-la-medalla-de_17.html

     Además os dejo a continuación el microrrelato "Equilibrio", para quién lo quiera leer directamente en mi blog. Espero que lo disfrutéis...¡un abrazo!:


Gabriel terminó con el reinado del mal de Matilde, soberana de la guardería. Ningún niño se libraba de llegar a su casa alguna vez con un ojo morado, una hemorragia nasal o los dientes de la malvada niña marcados en la piel. La profesora no sabía qué hacer ante las quejas de los padres, pues desconocía el origen de las lesiones. Los pequeños no se atrevían a denunciar a su agresora. La represalia podría ser aún peor. La pequeña Matilde, de cuatro años, les daba collejas con su supervelocidad, cuando la profesora no miraba. ¡Le encantaba verlos llorar! Si alguno disfrutaba con un juguete, iba presta a romperlo, con su superfuerza. Además,  era superinteligente. Sabía que esos poderes podían ser utilizados para hacer el bien pero…¡era tan divertido usarlos para provecho propio! Nadie conocía sus habilidades, ni siquiera sus padres. Si algún adulto la acusaba, ella expandía sus pupilas azules, y ponía rostro angelical. Nunca la castigaban.
Un día, Matilde acechaba a un pequeño, dispuesta a propinarle un buen susto, gracias a su invisibilidad. Algo le impactó en la cabeza, lo que provocó que volviera a ser visible, y cayera al suelo, presa del aturdimiento. Al otro lado del aula, Gabriel, el niño nuevo, sonreía, los ojos brillantes. Un biberón, lanzado con gran precisión, había tumbado a la niña. Gabriel también tenía superpoderes. Se erigió en el defensor del resto de la clase. Matilde aprendió entonces una gran lección: el universo es como una balanza que siempre acabe hallando el equilibrio.

10 mar 2011

Resultado concurso "El bien y EL MAL", de Irene Comendador...

     ¡Hola a todos!

     Una vez finalizada las votaciones del concurso organizado en el blog de Irene Comendador, ya se conocen los relatos ganadores. En primer lugar, ha quedado el relato "Condena de Luna", de Karol Scandiu. En segundo lugar, "El Rostro de la Inocencia", de Sokaly. Y en tercer lugar, "Eternos", de Marcos DK. ¡Felciidades a los tres! Os dejo el enlace que os llevará directamente a la gala de entrega de premios. Un poco más abajo, tenéis el listado de los relatos participantes entre los que se encuentran los ganadores, por si queréis leerlos: http://www.irenecomendador.blogspot.com/

     En cuanto al relato con el que participé, "La carbonera", se quedó con dieciocho puntos, si no he contabilizado mal. Desconozco en qué posición terminó, pero estoy muy orgulloso del resultado, ya que me han votado lectores que no conozco de nada. Por los comentarios vertidos en el blog, he podido deducir que algunos participantes y votantes tenían algún lazo de amistad. Yo era totalmente nuevo en esas filas de blogeros. No insinúo con estas palabras que haya existido "amiguismo" a la hora de votar, pero sí que algunos lectores y votantes que, según confesaron, no se habían leído todos los relatos participantes, supongo que leerían los de sus amigos/conocidos, votando en ese sentido. Desconozco si la organizadora ha tenido en cuenta los votos de aquellos que confesaron no haber leido todos los relatos. Supongo que no.

     Sea como fuere, he disfrutado mucho con el concurso, leyendo todos los relatos, y votando los que me parecieron mejores (de los tres que voté, dos se han hecho con el segundo y tercer puesto). Además me he llevado un diploma:



    Bueno, sin más dilación, os dejo mi relato, "La carbonera", para que déis vuestra opinión si es vuestro deseo...¡un abrazo!

     La Carbonera. Ese era el sobrenombre con que la conocían los vecinos del barrio.

- ¡Carbonera! ¡Que tu padre ha desembarcao, vete deprisa pa tu casa! – le gritaba una vecina que volvía del mercado, la cesta colgando del brazo, llena de escasos alimentos y de muchas noticias oídas en aquél mentidero.

     Y corriendo que se iba María, el cuerpo temblándole como las flores en un día de levante, presa del pánico. Allá quedaron en la plaza los juegos que compartía con otros niños, los saltos, las risas, los corre-corre que te pillo…Rauda se dirigía hacia el miedo y el dolor.

- ¡Que viene pa! – informó a su hermana pequeña, Matilde, la Carbonera chica, que jugaba sentada en el suelo con una piedra, a modo de muñeca, meciéndola entre sus brazos. Las pupilas se le dilataron con el terror que le provocaba ese hombre enorme, sucio y cruel, al que debían llamar padre.

     Entraron por el zaguán oscuro, de pasillo prolongado, que desembocaba en un viejo patio de losas sueltas, y accedieron al interior del bajo izquierda, su hogar desde que nacieron.

- Llena de agua el barreño y coge un paño limpio – ordenó a la pequeña Matilde, que se apresuró en aupar un cubo de hojalata, casi tan grande como ella, y se dirigió al centro del patio, al pozo. - ¡Y sacúdete la ropa, que la tienes llena de polvo!

     Mientras, puso una olla a hervir y sacó, de un ajado armario, unas patatas llenas de moho. ¡Cuántas veces durante las últimas semanas se había relamido pensando en devorar esos manjares! Pero el miedo a una paliza era mayor que el tenido a la muerte por inanición.

     A duras penas y con sumo esfuerzo, Matilde, la Carbonera chica, acarreó varios cubos de agua, hasta que el barreño circular situado en medio de la estancia estuvo lleno.

- Zúrcete ese agujero…¡rápido!

     Matilde estaba lívida por el miedo, pero consiguió controlar sus nervios y, cogiendo aguja e hilo, se apañó para coser el boquete del traje mil veces puesto para todo.

     El agua de la olla empezó a hervir y María echó varias patatas peladas en su interior. Rebuscó por los cajones algo de sal, sin éxito. Una mueca de frustración y miedo se dibujó en su rostro. A su padre no le gustaba que el almuerzo estuviera soso. Agitó el abanico bajo las brasas, para avivar su poder calorífico. Había guardado esos trozos de carbón para el regreso de su padre. María era muy precavida en lo que a evitar arranques de cólera de su progenitor se refería.

     Una de las apolilladas puertas se abrió de un violento golpe. Paco Carbonero, entró en su hogar, la bota de vino colgando lánguidamente de un hombro, el petate con la ropa sucia en el otro. Su inseparable navaja asomaba por encima del fajín rojo. Descomunal como una montaña, robusto y fuerte cual bestia salida de los avernos, el pelo cano, enmarañado y sucio y los dientes amarillos, observó la estancia.

- ¿Dónde están mis princesas? – bramó con una sonrisa estúpida en el rostro.

     Las niñas dejaron sus quehaceres y se dirigieron sumisas a darle un beso en la mejilla a su padre.

- ¡Mmmm! ¡Algo huele muy rico por aquí! – graznó con su voz rota, de borracho habitual, moviendo su nariz arriba y abajo. Tiró el petate a un lado y se dirigió a la olla humeante.

     La Carbonera recogió presta la ropa sucia, dispuesta a lavarla en cuánto su padre diera permiso. Éste, con la misma cuchara de palo con la que María había removido las patatas, engulló de buen grado gran parte del contenido del recipiente. Luego, expulsó un sonoro eructo.

- Ahí os he dejao un poco – anunció, generoso. – Aunque está algo soso. Voy al catre un rato, que estoy reventao…¡No molestéis, y ni se os ocurra salir a la calle! – con estas palabras, se dirigió a la estancia que usaba de dormitorio.

     Las niñas suspiraron aliviadas. Luego, apuraron la comida que su padre les había dejado. Al menos, había regresado de este viaje de buen humor…María sabía que eso no iba a durar demasiado.

     La Carbonera, María y la chica, Matilde, se metieron en la estancia contigua a la que había ocupado su padre. Allí, en esa vieja carbonera, dormían las dos juntas, sobre un montón de paja, cual animales. Notó como su hermana pequeña temblaba. La abrazó.

- No te preocupes…- susurró a su oído. – Mientras yo esté aquí, nada te va a suceder.

     Paco el Carbonero, marinero de profesión, padre de las Carboneras, María, la mayor, y Matilde, la chica, era un hombre sin alma. “El mayor bicho que exista en la tierra”, según palabras textuales de algunos vecinos, que no se atrevían a decírselo a la cara, pues ese hombre era una especie de monstruo irracional que actuaba por impulsos.

     Desde que acabó la guerra, era marinero del “Horizonte”, un barco mercante que hacía la ruta de las Islas Canarias. Entre su sueldo, que se gastaba en burdeles y alcohol, y los trapicheos con los productos de contrabando que traía desde las islas, sobrevivían él y sus hijas a duras penas. La posguerra estaba siendo muy dura, una época de hambrunas y muerte. Su mujer murió poco después del conflicto bélico, presa de “algo malo”, como decían las gentes del lugar cuando alguien se moría a causa de una enfermedad desconocida. Paco la odiaba por haberlo dejado sólo con las dos niñas. A decir del Carbonero, lo había hecho adrede, eso de morirse, por las palizas que solía meterle cuándo estaba borracho. Tampoco le importaba demasiado, pues, al menos, sus hijas seguirían haciendo las tareas domésticas y cuidarían de él, como merecía todo hombre.

     También se buscaba la vida, en tierra, robando carbón de las carboneras de la estación. Con la noche como cómplice, saltaba las rejas de la estación de tren, accedía a las construcciones achaparradas que contenían el carbón y robaba uno o dos sacos. Luego, los escondía en la estancia donde dormían sus hijas, en un cuarto secreto que había bajo aquélla. Levantando una losa, en lugar de tierra, una compuerta de madera daba paso a una pequeña habitación. Una vez, las niñas le preguntaron por el origen de aquel cuarto secreto, a lo que el Carbonero respondió que se trataba del lugar donde antiguos piratas escondían su botín de las posibles pesquisas que pudieran hacer las autoridades. Quizás no fuera descabellada la original hipótesis de Paco, teniendo en cuenta la historia de la ciudad donde vivían. Ahora, el Carbonero la tenía llena de baratijas que traía consigo de sus viajes. También la utilizaba para esconder el carbón robado. Luego, trocaba el combustible con sus vecinos, por comida o algunas monedas. De ahí que las gentes, haciendo un juego de palabras con el apellido de las niñas, las llamaran las Carboneras.

     El regreso de Paco era el inicio de un calvario para María y Matilde. Su padre no las dejaba salir durante el período que duraba su estancia en tierra. Las encerraba en su cuarto todo el tiempo que le placía, y las castigaba severamente si se quejaban. Las niñas no salían durante días, y de nada servían los llantos y súplicas. Se conformaban charlando entre ellas, y escuchando, con mucha envidia, a los niños que jugaban en la calle. Paco era tremendamente violento. Cualquier cosa le molestaba: si el agua del baño estaba fría, le propinaba una sonora bofetada a la causante; si la ropa no estaba bien planchada, fuerte patada…Las hermanas debían ser muy cuidadosas con todo lo que hacían o decían. Incluso con lo que no hacían ni decían.

     Su violencia, su maldad ilimitada, era de sobra conocida por los vecinos. Se rumoreaba que en la guerra de los años diez y veinte, muchas mujeres autóctonas, seducían a los soldados españoles, que las seguían excitados, encontrando la muerte en las manos de grupos de hombres enemigos que los esperaban escondidos dentro de las casas. Contaban que, a Paco, una de esas mujeres intentó hacerle la jugada, provocándolo sensualmente para que dejara su patrulla y fuera con ella a algún sitio apartado. Paco sacó su navaja y la rajó de arriba abajo sin darle posibilidad de defenderse. El niño que gestaba quedó colgando del vientre abierto de la madre moribunda. Decían también las lenguas chismosas que, cuándo un preso de la cárcel local daba problemas, la guardia civil detenía a Paco con cualquier excusa, como la de meterse en alguna reyerta o pegar a sus hijas. Una vez dentro, negociaban con él: la libertad por meter en cintura al rebelde. Poco duraba el genio del preso de turno. Paco, pronto dejaba claro quién mandaba allí. Los presos más viejos le respetaban lo indecible, pues el Carbonero no dudaba en lisiar o matar si era necesario, con la complicidad de las autoridades.

     Si se emborrachaba era peor que el demonio. Muchas veces, tras darle una paliza a sus hijas, se encerraba con María para tocarla, mientras jadeaba como un perro. La niña, con objeto de evitar que se centrara en su hermana menor, se dejaba hacer. En esos momentos en que su padre se apretaba encima de ella, María se evadía, observando absorta a través del enrejado de la ventana, desde la que se veía el infinito mar, azul y límpido…Muchas veces, su madre muerta se asomaba desde fuera y le cantaba viejas canciones de cuna para que se olvidara de lo que le estaba pasando. Mas, Paco, de repente, se reponía de su ataque y, antes de consumar, se levantaba diciendo: “Aún no; aún no…sólo es una niña…”. Entonces, se marchaba, dejando a María una irreparable marca, en el cuerpo y en el alma.
El padre Saturnino, quién tenía mucho cariño a las pequeñas hermanas, había hablado a veces con él. Cuando los vecinos las escuchaban gritar, desesperadas, algunos golpeaban la puerta de la casa de Paco, exclamando: “¡Déjalas, que sólo son unas niñas!”, sin atreverse a entrar para evitar el enfrentamiento con el Carbonero. Otros vecinos ignoraban lo que ocurría…¿cómo podía decirle alguien a un padre la manera en que debía educar a sus hijas? Pero el párroco intentó convencerlo, en una charla amistosa en la taberna, de que debía cejar en su comportamiento hacia María y Matilde.

- Es que no se qué me pasa, padre – había respondido el Carbonero, sumiso cual cordero ante ese representante de Cristo. – Es el vino, que me duele aquí arriba y me vuelve loco – se excusó clavando el dedo índice en su sien.

    Pero, al final, siempre volvía a las andadas.

     Cuando partía a otro viaje, las niñas suspiraban aliviadas. Seguramente las hubiera matado de saber que pisaban la calle en su ausencia. “Sólo las furcias van solas a la calle…¿ustedes sois unas furcias?” reñía borracho como una cuba a las dos hermanas, que sollozaban asustadas, totalmente inmóviles de puro miedo.

     La Carbonera, María, guardaba un poco de petróleo para resguardarse del frio durante los viajes de Paco. Su padre cerraba con llave la puerta donde tenía el preciado carbón, por lo que las niñas se morían de frio con el crudo invierno. El Carbonero partía hacia sus viajes sin preocuparse por dejar a sus hijas comida, dinero o manera de calentar la casa en su ausencia. Es por ello por lo que, cuando entregaba a María algo de dinero destinado a comprar petróleo para la lámpara que Paco tenía en su estancia, aquélla se cuidaba de volcar algunas gotas en una vieja lata de galletas que perteneció a su madre.

     Escondía la lata en casa de una vecina, que le guardaba el secreto. Cuando su padre marchaba y el frío arreciaba, la niña usaba el combustible para encender una hoguera que las calentara, dentro de un cubo de metal. Aunque a duras penas, iban sobreviviendo. La caridad de algunas mujeres del barrio, que les daban pequeños curruscos de pan, o las vainas de las judías verdes hervidas, evitaba que murieran famélicas. El padre Saturnino, que ayudaba con el poco dinero destinado a su sustento a las familias más necesitadas de la ciudad, era otra inapreciable ayuda con la que contaban las desdichadas hermanas. A veces, el párroco guardaba los recortes de las obleas y se las llevaba de regalo a las Carboneras. Las niñas las devoraban como si de una inigualable chuchería se tratase.
Nadie osaba plantar cara a Paco el Carbonero. Ni siquiera la guardia civil que, como se ha narrado, lo utilizaban a veces para sus propios fines. Aunque eso no obstaba para que, en ocasiones, le dieran un toque de atención: “Paco, si las matas, vas a pasar mucho tiempo en prisión. Aguanta un poco la mano”.

     Ahora, su padre había regresado. Matilde se quedó dormida sobre el jergón de paja, pero María no lograba conciliar el sueño. No podía evitar imaginar los calvarios a los que iban a enfrentarse las dos hasta que Paco volviera a marcharse. El suave oleaje, que rompía contra la muralla sur de la ciudad, era suave melodía que acunaba a María, arrastrándola con sus efectos calmantes hacia el mágico y hermoso mundo de los sueños. Pero un porrazo la arrancó de la duermevela. Con sorpresa, se percató de que había anochecido. María había estado durmiendo todo el día. Fuera, en la estancia de la pequeña cocina de carbón, oyó a su padre cantar muy alto viejas marchas militares. Su voz se empañaba bajo los evidentes efectos del alcohol. La puerta se abrió de súbito.

- ¡Fuera de aquí, Matilde! – ordenó sin lugar a réplica.
La Carbonera animó con suavidad a su hermana pequeña a que abandonara la habitación.

- Ya lo he visto…- anunció con una risa gutural, tambaleándose frente a María. – Los paños manchados. Felicidades: ya eres toda una mujer.
     La guardia civil había inspeccionado la casa, tras la denuncia de los vecinos. Habían hallado, bajo una de las estancias, el foco del incendio. Reconocieron el cuerpo carbonizado de Paco, el Carbonero, por la navaja de gran tamaño que siempre llevaba al cinto.

- No lo entiendo – había dicho uno de los agentes. – El carbón no arde tan rápido. Le hubiera dado tiempo de escapar, aún borracho como una cuba como estaba, según dicen los que le vieron por última vez salir de la taberna. Además, la trampilla por la que se accede a la carbonera secreta estaba cerrada con llave. Alguien tuvo que hacerlo.

- ¿El qué? - preguntó el padre Saturnino, que había acudido corriendo al saber de la desgracia, preocupado por las hermanas.

- Prender fuego al carbón y cerrar la trampilla con llave.

- No señor – dijo tajante el cura. – Está claro que ha sido un accidente. El abuso del vino puede ser mortal.

- Claro, claro. Así lo comunicaré al capitán y al alcalde – respondió el guardia, mirando de soslayo a las hermanas que, de manos del cura, observaban abstraídas el suelo. Sus ropas manchadas de hollín evidenciaban la suerte que habían tenido de no morir pasto de las llamas.

- Yo me ocuparé a partir de ahora de vosotras – anunció el padre, sacándolas de allí para siempre.

     María, la Carbonera, dejó de hablar durante mucho tiempo. No volvió a hacerlo hasta que Matilde, la Carbonera chica, le contó cómo había oído la voz de su madre llamando a Paco desde la habitación secreta. Él, borracho, había acudido a su reclamo. Luego se había quedado dormido.
     Una cerilla, la confabulación de una vecina y el contenido de la lata de galletas, hicieron el resto.

    

4 mar 2011

De votaciones en concursos literarios...

     Como os informé en algún post anterior, he presentado un par de relatos en algún que otro concurso organizado por blogs literarios. Uno de ellos, de corte de ciencia ficción, llamado "Aquéllos que vivieron", y otro, "La carbonera", que en realidad no sé en qué género encuadrarlo. 

     La cuestión es que las votaciones ya han empezado, por lo que os emplazo a que leáis los relatos participantes y votéis vuestro favorito, siguiendo escrupulósamente las instrucciones dadas en cada blog para que los votos sean válidos.

     Para acceder a las votaciones del concurso "El Bien y EL MAL", del blog de Irene Comendador, y en el que participo con "La carbonera", debéis pinchar en el banner situado a la derecha de vuestro monitor. En cuanto al concurso "Palabras al Viento, lo que prefiráis...", del blog de Erzengel, llegaréis a él a través del siguiente enlace: http://erzengel-palabrasalviento.blogspot.com/2011/02/relato-para-concurso-aquellos-que.html 

     Por último, tan sólo me queda agradecer a las promotoras de estos concursos, el tiempo dedicado al proyecto, a su creación y difusión, pues gran favor hacen al fomento de la lectura y de la escritura, que tan necesarias son en los tiempo que corren. También a todos y cada uno de los participantes, por el esfuerzo realizado al escribir sus respectivos relatos. Y a los lectores. Gracias por estar ahí. Sin vosotros, muchos de los que nos ponemos frente al folio en blanco (o ante la pantalla de ordenador), para trasladar al mundo de lo real las historias que anidan dentro de nuestros corazones, caeríamos en un estado de indiferencia y apatía que acabaría con la raíz de nuestros sueños. Gracias, os digo, por aguantarnos, por criticarnos o alabarnos. Gracias por compartir con nosotros estas fantasías en forma de palabras.

     ¡Un abrazo! 

23 feb 2011

De reseñas y concursos literarios...

     Si echo la mirada hacia atrás y examino detenidamente la evolución de mi aventura editorial con "Relatos de sal", puedo afirmar dos cosas:

    - Primero, que la persona que piense en triunfar de la noche a la mañana con su primer libro, es un soñador. Seguro que todos los que publicamos por primera vez, hemos fantaseado con la posibilidad de ser el nuevo Pérez Reverte, o la nueva J.K. Rowling. Todo debe quedarse ahí, en una simple ensoñación. Si pasa a ser certeza, es muy peligroso, pues podemos caer en la tentación de olvidarnos de todo lo demás y consagrarnos a una actividad que no pasará, posiblemente, de ser una mera afición. Me puedo considerar dichoso, pues tenía trabajo antes de iniciar esta aventurilla, y sigo manteniéndolo. No he disminuido en mi rendimiento ni un ápice, y seguiré luchando en mi trabajo día tras día con todas mis fuerzas. Independientemente de que esté inmerso en la escritura de mi segundo libro. En cuánto a "Relatos de sal", estoy muy orgulloso de la cantidad de ejemplares vendidos hasta la fecha, así como, y sobre todo, de las buenas críticas que he recibido. En este sentido, se ha publicado una nueva reseña, esta vez en el blog "El Escritor Inédito", cuyo enlace os dejo: http://elescritorinedito.blogspot.com/2011/02/resena-novela-relatos-de-sal-de.html

     - Segundo, que existen una multitud de personas maravillosas pululando por internet, que comparten la misma afición por la literatura (leída y escrita), que un servidor. Muchos de estos nuevos amigos que estoy conociendo, sobre todo gracias a FB, nos ofrecen sus relatos, novelas, o artículos a través de sus blogs. Así mismo, a través de estos blogs, organizan eventos para que participemos tanto sus seguidores fieles como cualquiera que lo desee. Es muy bueno poder interactuar entre nosotros de esta manera, pues aprendemos los unos de los otros con los comentarios que se puedan realizar. Si observáis a la derecha de vuestro monitor, encontraréis sendos banners que os conducirán directamente a los concursos que, en estos momentos, se están llevando a cabo en los blogs de dos amigas escritoras: Erzengel e Irene Comendador. He participado en ambos, aunque la competencia es menuda. No obstante, os invito a leer los relatos que he presentado, y los del resto de participantes, para que votéis por vuestro favorito. Os dejo el enlace que lleva al relato presentado en el blog de Erzengel: http://erzengel-palabrasalviento.blogspot.com/2011/02/relato-para-concurso-aquellos-que.html En cuanto al de Irene Comendador, aún no se ha publicado aquél con el que participo, pero podéis ir disfrutando de otros muy buenos, pinchando en el banner.

     ¡Un abrazo!

8 feb 2011

Reseña literaria...


     ¡Por fin llegó! Si hay eficaz que catapulte un libro hacia su difusión por la red, eso es una reseña literaria. Sobre todo, si es positiva. Y aunque algún que otro blog, ya se había hecho eco de la existencia de "Relatos de sal", hoy se ha publicado la primera reseña realizada por un lector del libro. Es decir, el administrador de un blog dedicado a la literatura, ha leido "Relatos de sal", y ha plasmado su impresión del mismo. Esto es muy importante para su que, quienes no sepan nada de la obra en cuestión, se hagan una primera idea. Una toma de contacto, vamos.

     El blog es "A.D.N. Literario", y su creadora y adminitradora, Melina Jaureguizahar Serra, a quién estoy muy agradecido por las molestias que se ha tomado leyendo y analizando "Relatos de sal", presta este espacio a los nuevos autores con objeto de promocionar sus obras. Ella misma se dedica a este admirable arte de escribir,  y aspira, como todos nosotros, a convertirse en una profesional de la literatura.

     Os dejo el enlace a su blog, para que  juzguéis por vosotros mismos.

    ¡Un abrazo!

3 feb 2011

Primer concurso "Palabras al Viento"...

     Muchos jóvenes escritores se las ingenian de mil maneras con objeto de difundir al máximo la gran calidad de sus escritos. Para ello, ponen en marcha las más variopintas de las actividades para atraer al público, participe y, además, se haga asiduo de los contenidos de los blogs donde publican.

     Esto ocurre con el blog "Erzengel: Palabras al Viento". En este maravilloso sitio, colmado de la fantasía de su autora, autodenominada Erzengel, podréis encontrar relatos, historias y proyectos con los que deleitaros.

     Uno de las últimas ideas llevadas a cabo por Erzengel, es el Primer Concurso "Palabras al Viento, Lo que prefieras...", donde, el que lo desee, puede enviar sus historias, reseñas literarias o confeccionar una portada de alguna de las obras de esta joven escritora. Yo mismo, voy a participar con un relato que acabo de escribir, llamado "Aquéllos que vivirán". Como el plazo para presentarse al concurso termina el próximo 20 de febrero, supongo que mi relato no estará disponible para su lectura hasta entonces. No obstante, podéis disfrutar de los contenidos de "Erzengel: Palabras al Viento" mientras tanto. Luego, ruego comentarios acerca del relato con el que participo : D.

     Podéis acceder a dicho blog pinchando en el banner que tenéis a vuestra derecha, o bien en el siguiente:

     http://erzengel-palabrasalviento.blogspot.com/2011/01/primer-concurso-de-palabras-al-viento.html

     ¡Un abrazo!

1 feb 2011

Ve la luz la revista "Escritores Independientes"...


     En más de una ocasión,  he tratado el tema de las dificulatades que nos encontramos los nuevos escritores cuando queremos dar a conocer nuestra porducción literaria. Es un problema que vengo compartiendo con otros muchos autores noveles que he conocido en la red FB, gracias a los grupos "Escritores Independientes" y "Tertulia de Escritores Independientes", propiciados ambos por mi amigo José Enrique Serrano Expósito.

    Como dice el refrán, la unión hace la fuerza, y desde hace un tiempo se viene hablando por aquellos lares de acciones conjuntas para hacer saber al mundo que existimos. Hacer ruido, vamos, para que el lector tenga consciencia de que, aparte de los autores de renombre a los que se suele leer, miles de nuevos escritores producimos una extensa obra que, en muchos casos, adolece de gran calidad literaria.

     Con esta premisa, se proyectó la creación de una revista virtual que pusiera voz y nombre a tanto autor desconocido. Así, gracias a la colaboración de algunos de estos nuevos escritores (incluido un  servidor), y de la mano de Daniel Estorach, sin cuyo impulso y trabajo arduo la revista tan sólo sería una idea guardada en un cajón, puedo anunciar que el primer número de la revista "Escritores Independientes", ha visto la luz.

     En ella podréis encontrar artículos de opinión, talleres, entrevistas a nuevos escritores, relatos e incluso una novela por capítulos. No todos los que hemos colaborado en su creación tenemos un texto publicado en este primer número, pues de ser así, hubiera sido interminable. No obstante, en cada número se publicarán  trabajos, reseñas y entrevistas de otros muchos autores que colaboramos en la revista o que pertenecemos a los grupos de FB que he nombrado anteriormente.

    Bueno, sin más preámbulo, os dejo un enlace donde podéis descargaros gratuitamente el número 0 de la revista "Escritores Independientes". Espero que la diusfrutéis.

    ¡Abrazos a todos!

25 ene 2011

Enlace al relato "Víctor, los pasos de la mosca", segunda parte...

     Ya sé, ya sé...mea culpa...Casi un mes desde la últmia publicación en el blog.

     Os ruego me disculpéis, pero estoy muy ocupado con varios proyectos que, espero, vean pronto la luz. Entre ellos, la preparación de mi segundo libro. Posiblemente, cuelgue un relato dentro de poco, en varias entradas, que puede que forme parte de este segundo trabajo, o puede que no...ya veremos según la extensión de las diferentes nuevas historias en las que estoy sumergido.

     Por ahora, y como lo prometido es deuda, os dejo un enlace a la segunda parte del relato "Víctor, los pasos de la mosca", único relato de terror contenido en mi libro, "Relatos de sal". En esta segunda parte, encontraréis el desenlace de la sorprendente historia del muchacho deforme cuya recuperación misteriosa estuvo unida a la adquisición de poderes sobrenaturales....¡Espero que disfrutéis con ella!


     Un abrazo.